VIDA Y OBRA DE VIOLA versus ¿MUSEO EN SAN LORENZO?
Nacido en Zaragoza, vivió en Lérida, Barcelona, París, Torremolinos, Madrid y San Lorenzo, donde murió tras vivir los últimos 25 años de su vida.
Escritor, poeta, intelectual, dibujante, y pintor de amplísimo bagaje vital y existencial. Fue miliciano con el POUM durante la guerra civil acabando prisionero en un campo de refugiados -Argelès sur Mer- en el sur de Francia. Luego pasó a ser combatiente en la Legión Extranjera Francesa contra los nazis y participa en la resistencia francesa. Vivió en la clandestinidad en París hasta que regresó a España.
Cofundador y colaborador de la revista Art de Lérida y de las francesas surrealistas La Main à Plume, Géographie Nocturne, Transfusion du Verbe… Amigo de los escritores Roberto Rius, César González-Ruano, J.F. Chabrun, Noël Arnaud, Camilo José Cela… y de los pintores españoles Oscar Domínguez, Benjamín Péret, Antoni Clavé, Grau-Sala, Antonio Saura y de otros como Henri Goetz y Francis Picabia…. En 1940 se hace amigo de Pablo Picasso para el que empieza a trabajar como asistente en su taller durante la época del Guernica.
Expuso en Checoslovaquia junto a los pintores españoles de la Escuela de París en la exposición Arte de la España republicana; su primera exposición en Madrid en la Galería Estilo contó con el aval de Eugenio d’Ors, Camilo José Cela y César González-Ruano y corrió a su cargo la primera exposición que realizó la revista Papeles de Son Armadans en Palma de Mallorca.
Su obra está colgada entre otros, en el Museo Reina Sofía de Madrid, en el Museo de arte abstracto español de Cuenca, el Museo Nacional de Praga, la Galería de Moravia, en las Galerías Vierny y Drouand-David de París, y muy diversas colecciones particulares y públicas repartidas por medio mundo.
¿De verdad creen que este personaje y artista no sería merecedor de un museo en El Escorial si se tuviesen los fondos documentales y pictóricos para ello?
Pues eso es lo que entendió el anterior equipo de gobierno de este Ayuntamiento (entonces en manos del PP) cuando dieron una patada al coleccionista de obras de Viola y crítico de arte, Javier Lacruz, ante el ofrecimiento de cesión gratuita de obra y documentación para su exposición en el Cuartel de Voluntarios, argumentando que Viola era un artista mediocre.
No sabemos qué motivó tal negativa, si el desconocimiento de la totalidad y complejidad de la figura de Viola (que hasta que Javier Lacruz publicó su completa y documentada biografía era inexistente, pero seguro que Javier encantado podría haberles ilustrado si se lo hubieran pedido) o bien el conocimiento de parte de su biografía y que su ideología y lucha activa a favor de la república les causara estupor…
Pero el resultado de todo fue que San Lorenzo perdió una posibilidad de oro para albergar un Museo sobre Viola, y no solo sobre el Viola Artista, sino también, sobre el Viola hombre, poeta, dibujante, intelectual, matador de toros……
Ahora….no sabemos si ya es demasiado tarde, las oportunidades pasan solo una vez y ya sabemos que hay que cogerlas en ese preciso momento, en ese instante, hay que tener la suficiente visión y aplomo para tomar decisiones valientes, incluso arriesgadas … y eso es lo que debemos exigir a nuestros gestores municipales.
Cuando el pasado sábado Javier Lacruz nos deleitó con la estupenda conferencia que dio en la Librería y nos narró la propuesta realizada y el desplante sufrido (por cierto, en la conferencia estaba presente un miembro del actual equipo de gobierno que se sintió avergonzado al saber lo acaecido y pidió disculpas por ello….) volvió a hacer la misma proposición de cesión gratuita de obra y documentación a nuestro pueblo……
Y digo que quizás ya sea demasiado tarde porque Javier Lacruz, tras esa patada recibida hizo esa oferta a otra ciudad, en este caso catalana, que también tiene gran relación con Viola, y ¡ay! amigos…. ¡Sorpresa! ellos no le han dado un no por respuesta, ni le han mandado a su tierra con los cuadros bajo el brazo… muy al contrario, lamentablemente para San Lorenzo …
Y también digo que quizás sea tarde, porque hace unos meses se aprobó en un pleno municipal, el destinar el Cuartel de Voluntarios a un Museo sobre la figura de Felipe II.
Pero es que se dan las siguientes paradojas: para un museo sobre Felipe II, no hay fondos para dotarlo de contenido, ni uno…pero parece que hay voluntad política (?), en cambio para destinarlo a la figura de Viola, sí que habría fondos…..pero ¿hay voluntad política? Desde luego no la hubo, no sabemos si la hay ahora.
Y nos hacemos las siguientes preguntas:
¿Es posible crear un museo de la nada, sin tener ni un solo fondo? -Seríamos el primer caso de la historia de España y del mundo y digno de estudio en ese caso- ¿De dónde se sacarían? ¿Qué continuidad puede tener un museo que solo tiene piezas cedidas y que cada cierto tiempo tendría que renovarlas pero sin cambiarse el material museográfico para no arruinar al municipio?
¿No tenemos suficiente con el gran museo que es el Monasterio, obra suprema de Felipe II? ¿Qué más se puede añadir sobre Felipe II estando el Monasterio? ¿De verdad que merece la pena montar desde cero un museo sobre Felipe II estando ubicado a 100 metros el Monasterio?
¿No tenemos ya suficientes museos históricos con el Monasterio y las 2 casitas? ¿No sería una oportunidad maravillosa que además de tener representación histórica el siglo XVI con el Monasterio y el siglo XVIII con las dos casitas, el siglo XX tuviera una doble representación: una con el Valle de los Caídos (haciéndose la revisión conceptual que se quiera) y otra con un museo dedicado a la vida de un intelectual republicano y gran artista de vanguardia vecino durante 25 años de San Lorenzo? ¿No sería un complemento argumental e histórico perfecto a la visita del Valle el museo sobre Viola y su vida?
Nos preocupa que se haya dejado pasar una gran oportunidad, pero más nos preocuparía que cuando se da una segunda ocasión, como parece ser el caso, que bien raro y extraordinario es en la vida, que permita el desagravio de una pueril y arbitraria decisión política, se dejara pasar de nuevo.
Esperemos que esta vez no suceda.
Marta Martín Worm